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Arquitectos: vgz arquitectura y diseño
- Área: 355 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Rafael Gamo
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Proveedores: Diez, ESRAWE, La Metropolitana, Muro Blanco, Rayito de Sol, Sunpro, lanz art.light
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicados en los pisos 40 y 41 de la icónica Torre Latinoamericana en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Miralto | Latino 40 no fue sólo la intervención de 2 pisos en este edificio icónico, el objetivo fue actualizar el restaurante preexistente y unir los 2 proyectos: Miralto (Restaurante) Nivel 40 (Bar) convirtiéndolos en uno solo, para generar un nuevo hotspot culinario agregando la experiencia de ser un atractivo turístico, para lograrlo utilizamos acabados y diseños mexicanos para reforzar su ubicación.
El diseño se centró en mantener abiertas las vistas a la ciudad, maximizar la altura libre y presentar un ambiente fresco e informal, que no compitiera con el diseño original de la torre. Se retiraron todos los obstáculos existentes para integrar todo el espacio y obtener los 360º de vista para los comensales. Dejando el núcleo central de circulaciones verticales. Nos concentramos en los recubrimientos en tres planos: piso de pasta, lambrines y celosías en muros y plafón.
Los únicos muros se generan en el núcleo, mismos que cubrimos con piezas de concreto, diseñadas especialmente con referentes de dibujos geométricos de las culturas prehispánicas, diseño se repite en todo el espacio, lambrines y celosías. Al ser un edificio que ha sobrevivido varios sismos, encontramos desniveles importantes en losas, para el plafón diseñamos una “pérgola” irregular, que absorbe las diferencias de nivel. En cuanto a materiales manejamos una paleta de colores y materiales muy sencilla, blanco y dos tonos de verde y carpintería de huanacaxtle, para mantener la idea de “terraza” y la luminosidad del espacio. La iluminación se diseño integrada a la pérgola de manera que no se obstaculiza en ningún punto la increíble vista a la ciudad
Para Latino 40, invertimos los colores de lambrines y celosías a negro para lograr un ambiente íntimo con reminiscencias a la época de construcción de la torre. Aprovechando el techo bajo y las vistas espectaculares de la ciudad se trabajó con el diseño de iluminación y espejos para generar efectos y reflejos de las luces de la ciudad dentro del espacio. Diseñamos tres barras que generan un recorrido y diferentes rincones de convivencia. Reinterpretamos la silla Acapulco en acero inoxidable y diseñamos la mesa “platino” para enfatizar el sitio.